En una ceremonia que contó con la presencia
de destacadas autoridades de la zona y de todos los
estamentos del colegio, el Instituto Chacabuco dio a
conocer su plan de trabajo con miras a su centenario. En
la ocasión, el Rector Pedro Díaz llamó a proyectar al
establecimiento, resaltando el concepto de apertura a la
comunidad no sólo en lo educativo, sino en todos los
ámbitos de la sociedad.
En una emotiva ceremonia, el Instituto
Chacabuco presentó su plan de trabajo para el próximo
lustro. En él, se expresa el camino que tomará el
colegio en los próximos cinco años y cuáles son los
objetivos que se perseguirán con miras a los próximos
cinco años. Con este acto se concretó uno de los deseos
del Consejo Directivo, que era mostrar las directrices
que seguirá nuestro establecimiento rumbo a sus cien
años de historia.
En la oportunidad, participaron de la
ceremonia ex-rectores, como los hermanos José Luis
Arranz y Luis Izquierdo. También asistió nuestro
capellán, el padre Humberto Henríquez y lo mismo
hicieron los representantes del Centro de Padres y
Apoderados. Todos con el deseo de conocer y reflexionar
acerca de las principales líneas de acción que tomará el
colegio.
"Este es el camino que queremos y hacia
donde iremos", dijo el Rector Pedro Díaz en una de sus
reflexiones. En su discurso, Díaz manifestó una vez más
su deseo de transformar al Instituto Chacabuco en un
centro de extensión y un punto de encuentro de la
comunidad. "Este plan de trabajo no sirve en el papel.
Tenemos que hacerlo propio y sentirlo como nuestra carta
guía para conseguir los objetivos que nos hemos
planteado", expresó el rector del Instituto Chacabuco.
Así, recibieron su plan centenario todos
los representantes de los estamentos del colegio, con un
especial énfasis en los alumnos de educación media, a
quienes se les llamó a "ser protagonistas". También lo
recibieron profesores y apoderados, cerrando una más de
las actividades programadas para celebrar la pascua de
San Marcelino Champagnat.